AQUI ENCONTRARAS NOVEDADES Y ARTICULOS

Publicaremos algunos artículos de interés para la vida cotidiana y noticias que pueden interesarte.

miércoles, 23 de mayo de 2012


REMEDIOS URGENTES  PARA UNA  SOCIEDAD
                          EN CRECIENTE VIOLENCIA
                                   P. Gregorio Iriarte

- Debemos   buscar un electricista 
          para restablecer  la corriente positiva entre las personas.
    
- Debemos buscar  un  oculista para  dulcificar tantas miradas hirientes.

- Debemos  buscar un artista para dibujar  sonrisas en los rostros
          amargados.

- Debemos buscar un arquitecto para construir la paz en los hogares y
         en nuestra sociedad en permanentes conflictos.

- Debemos buscar un jardinero para  llenar  de maravillosos colores
          y perfumes  nuestro mundo contaminado.

- Debemos buscar un profesor de matemáticas  que nos ayude a sumar
           y a contar  siempre  los unos con los otros en una sociedad
           tan individualista.
   
- Debemos  buscar un político  que busque más el servicio al pueblo
      que  el poder personal.

- Debemos  buscar un profesor que enseñe más con el ejemplo
           que con la palabra.

- Debemos buscar un sacerdote que nos enseñe que debemos amarnos
           y perdonarnos los unos a los otros  lo  mismo que Dios
           nos ama y nos perdona a todos.
  
                                          Cochabamba, mayo, 2012



                               NUESTRA  JUVENTUD CONSUMISTA
                                           P. Gregorio Iriarte o.m.i.

      Para  entender  el mundo de  los  jóvenes  hay que tratar de llegar a  comprender las razones y los motivos que orientan su conducta.
       No  es solamente  el lenguaje lo que les  separa de nosotros,  los mayores. Nuestra  juventud, bombardeada por la publicidad,  vive intensamente  “el imperio lo novedoso” que viene a ser como el eje  que orienta  su consumo.
       Cuando  hablamos  del “consumismo juvenil”  no nos estamos refiriendo al aumento del  gasto desorbitado en  cosas superfluas, sino a una nueva forma de pensar que les lleva   una  distinta forma de gastar y de consumir.  Los jóvenes  de la última ola son consumidores muy especiales que  parte de una nueva manera de valorar las cosas.  Podemos percibir también que  algo misterioso les conecta entre sí, ya que todos   valoran las mismas  novedades  tecnológicas  por más que sean de diferentes culturas.
  La moda es el eje alrededor del cual gira su vida: una moda que se expresa en el culto a lo nuevo. Eso  es lo que constituye “la hoja de ruta” de  su vida.
 ¿Qué valores o contravalores tiene esta novedosa  actitud consumista de la juventud actual…?. Vemos que es, ante todo, una reafirmación y  un fuerte despliegue  del “yo”. Todo lo último  tiene que estar a su alcance  para que  puedan sentirse realizados.  
   Lo lamentable, es que viven  como  “consumidores a la carta”. Lo que le gusta adquirir es  efímero y queda obsoleto y devaluado en un espacio  de tiempo cada vez más corto. Sin embargo, eso no les va a afectar. Lo ven como algo lógico  en un tiempo en el que “cambiar es  vivir”.  Se ven así mismos  como  competidores en una especie de impactante maratón... ¡Hay que estar al día para ser hijo de nuestro  dinámico  tiempo…¡   Para ellos “consumir” es  poseer  lo último, “enchufados”, como están,  a los últimos gritos de la moda tecnológica.
 Es la  manera que tienen  de  apropiarse del futuro. Tener lo último y, a ser posible antes que los otros,  es  el gran desafío de  cada día para ellos.
  Tanto la música moderna, como el cine y ciertas  expresiones culturales, les van a ayudar a hacer presente ese  futuro pero, sin embargo, será  el área tecnológica   la gran aliada para esta  inquieta  juventud.
    Lamentablemente, vemos que todo ello les  conduce a la exaltación del “yo”.  Es un “yo” que se ha  multiplicado.
    Ese obsesivo  ideal  de poseer  tener y estar  al tanto en la última novedad ha ido  reduciendo al mínimo las inquietudes  más importantes del espíritu. Se van apagando en su vida los  grandes ideales. Los referentes más importantes de su existencia  van desapareciendo, mientras percibimos,  cada vez  más profundo, un  gran vacío existencial.
  Se  ha ido  perdiendo  la base  del pensamiento humanista  y  la  referencia a los grandes ideales transformadores, tanto personales como sociales.
    Es necesario superar ese  “pensamiento débil” cada vez  más  presente.   Hay que lograr  que  en ningún momento se identifique  ni se confunda  lo “nuevo” con lo “mejor”.
   Todo desarrollo, por más científico que sea, será  falaz si no se lo  realiza desde un fondo ético.
    Es evidente que nuestra juventud  es expresión de  muchos valores, más allá de ese culto  por lo novedoso que hemos  criticado en el presente artículo, sin embargo siempre habrá que tener presente  ese  “tic” que les caracteriza  si  les queremos ayudar.


NUESTRO DESEO DE ESTE AÑO

"Caminar humildemente con Dios, amar con ternura y practicar la justicia"